Tiene más de cien relatos escondidos
Debajo de su falda
Donde guarda lo que piensa
Cuando crees que ella te habla.
Y es que no regala nada.
Y los demás creen que tienen
Su futuro esplendoroso
Y entre ella y los otros
Encontrarán tan solo
Carreteras secundarias,
Pasadizos arenosos.
Y no trates de buscar,
Lo que no existe no se puede derrumbar.
Mejor date la vuelta vuelve a tu lugar.
¿No ves que no tiene espinas?
¿No ves que no respira,
Que aún no venció al ladrón
Que le quitó el color a su sonrisa?
Ella conoce los abismos
Que puede abrir por dentro.
Te entremira y desespera
Cada uno de tus huecos.
A cada brizna de vida le da un momento.
Y entre nombres que no se siente
Se pierde y se descuelga
De las sogas que le aprietan,
De migajas en la mesa,
De tijeras que no cortan
Y de heridas que no cierran.
Y no trates de buscar,
Lo que no existe no se puede derrumbar.
Mejor date la vuelta vuelve a tu lugar.
No ves que no tiene espinas?
No ves que no respira,
Que aún no venció al ladrón
Que le quitó la luz a sus mejillas?